Por John Wieners*
Selección y traducción del inglés al español por Lucas Costa**
Crédito de la foto Joanne Kyger y John Wieners
Nueva York (EE.UU.), 1968
9+1 poemas de Supplication.
Selected poems of John Wieners (2015)
“Un elegante rigor parece ser el modo natural de Wieners; sentimos la fuerza de la deliberación en su forma más libre, donde nunca resulta casual. La gracia es milagrosa, porque apunta a las intensidades, por un orden que le da forma y luego restringe los sentimientos para hacerlos arder”.
Robert Duncan
“Lo que nos conmueve no es la oscuridad del mundo en el que los poemas fueron escritos por la piedad, sino por el terror y la alegría que es la belleza de los poemas mismos. En Wieners, el glamour está en la música de la palabra”.
Denise Levertov
9+1 poemas Supplication.
Selected poems of John Wieners (2015)
Julio 27
Envuelto en una sábana india
con la neblina cayendo sobre este papel
podría ver millas en el Océano Pacífico fuera
pero la bruma me bloquea la vista.
Al libro de Willa Cather
se lo comieron las ratas lo rompió la lluvia
a mi lado, encontrado en la Casa de Piedra
de una montaña de California.
Libro de prados, libro de poemas de
amor para un tal Johnny Español (lo apurado que estaba cuando escribí
su nombre
en una taza de plata comprada en Venecia
es dulce la vida juntos, hay pájaros en las ramas,
líneas quebradas
escritas bajo un techo que se abre
al cielo,
Mujeres de los prados escribiendo
sobre roca.
Esperando.
Quedarse fuera del mundo, por encima de una sábana de niebla
perforado acá y allá por las notas de un pájaro
estamos sobre el mar
el sol tan alto
nos ciega los ojos y los pájaros
se elevan hacia nosotros
en el viento se arremolina el trigo.
Leí Vachel Lindsay: Las ballenas doradas de California
…………Willa Cather: Crepúsculos de abril
Qué puedo escribir
para echarle fuego al corazón
como la leña que se parte y llamea
en la chimenea de mi izquierda.
Aquí no hay demonios, solo amigos.
Acaso el poema brota fuera del dolor
tiene el corazón que latir en una velocidad
super forzada para que la palabra
se produzca, como el oro
de la alquimia
se trasmuta.
No hay sueños
En los que no haya vivido a excepción de
Afuera de la ventana Oeste y
la puesta de sol.
En la ventana una lámpara de kerosene
por cuya luz escribo.
A mi izquierda el fuego en la chimenea
y 4 personas tras ella,
La mujer, su hija y 2 hombres,
sentados en el piso de piedra, hablando de la adoración
al sol y de adorar al fuego,
el grillo
en el techo donde los murciélagos viven,
todavía muestra un azul más claro que los negros
rincones de esta pieza,
casa de piedra con puertas de madera
al costado de una cresta que se yergue detrás
de la casa una colina
Fuera del Oeste Ventana
Fuera de la ventana Oeste y
La puesta de sol.
Una lámpara de aceite en la ventana
Agosto 11
Un poema para Susan
Solo la dicha de ella
de oírla moverse por la pieza,
no hay necesidad de relatar acciones
describir no basta, es como
adjetivar
pero ella respira
como un verbo, doblada
la ropa contra su guata, cepillar
los brazos de su abrigo.
No un gato
pero mujer.
Un secreto guardado de mí antes
de verlas desentrañar su mundo,
inclinarse ante los
objetos amados en ellas
El poema demanda un grado de atención que las drogas, porque ellas te aflojan, lo terminan por disuadir a uno del poema. Al final me siento no con mis máximos poderes. Aunque una amplitud o una dimensión te sean dadas o no, es casi irresistible. Cada acción, objeto saca adelante un sentido especial que no tenía antes.
La cara de una mujer.
Ambos lados de mi naturaleza llegan a primer plano con tanta fuerza.
…………………………………………………………………Los pájaros, primero unos afuera mi ventana. La niña pescando en su bolso, abriendo maletas, y todo esto a oscuras. Una magia que me dio una vez que nací a esta hora. Y compartimos de nuevo y el primer entusiasmo de ese movimiento, de nuevo ahí. Sobre la droga. El calorcito del vientre materno, con todo el conocimiento odioso del mundo tirado sobre nuestras caras, llorando detrás nuestro.
Porque esa es la prisa
de
la vida?
Un poema para cosas atrapadas
Esta mañana con una llama azul flameando
esta cosa se abre camino adentro.
El viento sacude los bordes de su ser amarillo.
Jadea al respirar.
Viviendo por lo instantáneo.
Por qué quieres salir.
Escalando el borde negro de la ventana.
Me siento adolorido.
Una bata roja entre los restos.
Te doblas y subes, antena extendida.
Yo sé que la mariposa es mi alma
venida a menos por la batalla.
Un ventilador Gigante en la espalda de
un escarabajo.
Una crisálida de oruga que busca
un nuevo hogar lejos de esta pieza.
Y va a desaparecer de vista
al tirar de cuerdas invisibles.
Aunque tan tenue, tan fina
esta cosa es, yo soy
sentado en la cama dura, podríamos
desaparecer de vista como la calada
de un cigarro invisible.
Cofre peludo, seda harapienta bajo
alas que pegan contra el vidrio
que nadie abrirá
Los diamantes azules en tu espalda
son demasiado hermosos como para
irse con ellos.
Te observo
toda la mañana
entera.
Con mi mano en la boca
Cocaína
Porque yo he visto el amor
y su cara elije Corazón de Corazones,
carne de fuego puro, fundiendo desde el centro
donde todo movimiento se hace uno.
Y he conocido
la angustia con que la Cara dejó de mirarme
con la Rosa del mundo
que miente enrollada
en un paraíso artificial que es el Infierno para dentro.
Si supiera que estás ahí
me tiraría de rodillas a rogarle a Dios
que te entregue en mis brazos de vuelta.
Pero no tiene sentido intentarlo.
Solo uno puede tomar cartas para reducir su miseria,
confundir las sensaciones para que esta Cara,
que duele en el corazón y hace nueva cada
estrella menos cerca a la fuente del deseo,
se desvanezca en la carne que inflama de noche,
a punta de sueños y un anhelo infinito.
En la oscuridad
Es un error asumir el amor
donde no existe
lo creamos dentro de nuestros corazones
un objeto que valga la pena
otros podrán compartirlo
y entrar en esa arboleda sagrada pero
es una cuestión de nuestro propio cuidado
solos
Queremos algo y
construimos acorde pero
idiotas en creer en que
estará ahí cuando uno lo necesite en serio
Solo en una cama de hospital
o en la cárcel, he estado
al Hotel Dixie a quien nadie le importó
todavía dentro del seno familiar vive
y con amigos, sus parientes, de
igual reconocimiento en los ojos
he construido un fuego ahora para calentarme
a través de estos días de verano
solo espero que estés de vuelta rápido
para atizar tus manos de su llamita tenue
Los ciegos ven solo este mundo
(Una carta de Navidad)
Hoy el Cordero de Dios llega por correo
sobre la Cruz, al lado del Marinero Guapo
de Rusia
en su chaleco cuello de tortuga. Hoy hacemos en amor
en nuestras mentes
y las mujeres vienen a colación, ganando terreno.
Es Navidad, Hanukkah, —herencias que dejamos
atrás
En Israel.
Hay una nueva cruz en el viento, y es nuestra
mente, imaginación, voluntad
donde el descubrimiento se hará
de cómo pasar la noche, cómo compartir el regalo
de amor, nuestro cuerpo, que es verdadera
iluminación
del presente instantáneo.
No hay otro viaje qué hacer. Recibiremos todo
lo que necesitamos.
Sin percepción, permanecemos ciegos.
Sin visión, podemos ver este mundo solamente.
Estado privado
Dientes de león bailan
Y dedales de oro en el pasto
me recuerdan a flores de otro
verano, floraciones simples
rosas y alstroemerias junto a la pared
vainas de algodoncillo, ramas de zumaque
lilas a través de la carretera, margaritas, broches
de moras, violetas podadas
hace años atrás todavía crecen en mi mente
como peonías o geranios plantados, botones
de aciano en campos suaves repletos de tréboles
de cuatro hojas, viniendo una y otra vez al camino
de helechos que rectifica a la memoria como perenne
contra el severo y duro rostro de oficinistas encarceladores
y la fría regulación más dolorosa que los brazos del amante
o flores que fascinan, pero no muy duraderas.
No, el tulipán salvaje debe durar más los muros
de la cárcel sin importa qué crezca allá dentro.
6.21.69
Súplica
Oh poesía, visita seguido esta casa,
empápame la vida de éxito,
déjame que nunca esté solo,
dame una señora y una casa.
Sácame esta maldición de encima
de muertes precoces y drogas,
hazme un amigo entre colegas,
préstame amor y puntualidad.
Devuélveme a los hombres que enseñan
y, por sobre todo, cura las
heridas que deja el querer lo imposible
a través de este vacío pospuesto.
El dinero no es monógamo
Un hombre pobre no puede hacer uso de sí mismo.
Está desmoralizado por la excesiva derrota del esfuerzo.
No puede tomar órdenes incluso por el bien de sí mismo
que generalmente es al revés.
Se rinde y desespera, aunque cree en las condiciones del entorno.
Produce una revuelta inflamable en la sublevación inconsciente.
Cree que todo lo que pasa
es por desgracia de otros.
Avivándose como lluvia por las calles, se sumerge en la fe
al destino, deber o leyendas culminantes de la consciencia
de eros, belleza, voluntad & condición
en cuanto distancia u organización matriz.
Se deja llevar por la marea, cuidando
de haberse quitado la ropa antes & sondeado su relación
al propósito de la mayoría, contribuyendo libremente a su contenido & formulario actual,
pequeños recursos salvados hacia mareas implacables
del tiempo, profundidades bajas & eventuales descargos.
Reconoce que nada de esto le asusta. Ni sus datos predichos.
**(Boston-EE.UU., 1934 – Boston-EE.UU., 2002). Poeta y dramaturgo. Miembro fundador de la llamada «New American Poetry», que floreció en Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial. Se graduó en el Boston College (1954), y se inscribió en el clásico Black Mountain College. Fundó la pequeña revista Measure (1957–1962) y se embarcó en una vida peripatética, participando en comunidades de poesía en Boston, San Francisco, Nueva York y Buffalo entre los años 50 y 60. Publicó múltiples poemarios, tres obras de teatro, panfletos y libros-objeto. Robert Creeley lo describió como “el mayor poeta de la emoción” de su tiempo. El 2015 apareció Supplication. Selected poems of John Wieners (Wave Books), editado por Joshua Beckman, CAConrad y Robert Dewhurst.
**(Santiago de Chile-Chile, 1988). Poeta y editor. Ha sido becario de la Fundación Neruda (2010) y obtuvo el Premio Roberto Bolaño (2012). Durante seis años impartió, junto a Cristian Foerster, el taller de escritura poética emergente Al pulso de la letra. Se desempeña como mediador de la lectura con jóvenes privados de libertad. Ha publicado en poesía Encomienda (2013) y Playa de escombros (2017); y ha editado el libro Chanchullos. Fragmentos de entrevistas a Nicanor Parra (2014).