Por Nahilí Jarcovsky*
Crédito de la foto (izq.) Facebook de la autora /
(der.) Alción Ed.
7 poemas de Casa en mi boca (2018),
de Nahilí Jarcovsky
Instante
no sé exactamente
cómo capturar con mis manos
el amor y el olor
del verde de las plantas
o cómo perpetuar en el tiempo
este mismo instante
dicen que
las cosas minúsculas
son las que se olvidan fácilmente
pero no
no quisiera
dejar de ser pequeña
cosecha tardía
creo que
mi piel emana
un leve olor a
¿maíz?
es un poco absurdo porque
-sinceramente-
yo no siento estar
a punto de cosecha
todavía no veo
lo amarillo de mi carne
ni los granos tiernos
o brillantes
sí
de vez en cuando amaga
alguna que otra brizna
pero hasta ahora
no me pareció
haber visto prosperar
a ninguna
visita
ahora que sé
cómo llegar al lugar
adonde los pequeños
que habitan las plantas
me transportan,
me siento más tranquila
ya conozco el lugar en donde sé
que en silencio me conocen
por ahora sólo en sueños
es que aún soy demasiado
grande y torpe
para ciertas cosas
esas vidas invisibles
me dan el alivio de saber
que alguien me piensa
…………………me sonríe
…………………y me espera
diminutamente
aunque yo no lo vea
a simple vista
imagen
si yo fuera
mitad luz
y mitad árbol
y vos
quien se colgara
de mí sostenido
una mano en lo blanco
y otra en la corteza
podrías treparme
y yo dejarme tocar
y yo dejarte buscar
dejarte
la savia
resbalar en tus dedos
shhh
en la noche soy más valiente
no sé si porque lo oscuro
se parece a la llanura
o porque mientras todo duerme
yo tuviera que estar alerta
cuidando lo que no conozco
como si las estrellas levantaran
el aire mojado en el que soy liviana
la tierra mullida
que cambia el peso de las cosas
brizna
el paso del tiempo deshojó lo vencido
y la llaga en su punto más húmedo
fue el terreno propicio
de esta brizna comestible
que algunos llaman
-poesía
balance
quizás éste sea
el balance de un poema:
cada uno se tensa
hacia donde lo inclina su sombra
y del mismo modo se alivia
hacia donde lo empuja su centro