Por Luis Alonso Cruz Álvarez*
Crédito de la foto (izq.) Ed. Vallejo & Co. /
(der.) www.descontexto.blogspot.com
5 poemas de Jardín mecánico (2022),
de Luis Alonso Cruz Álvarez
I (fragmento)
Sobre lo roto
construye el sonido de tu voz.
En los cementerios
siempre hay un hombre sabio
dando respuestas,
una historia diferente para cada pregunta,
un rumbo distinto del viento en cada estrella.
Los castillos de arena son un refugio
para que el sonido de los ancestros
se calme
y nos deje escuchar
la totalidad.
Ahora,
guardemos nuestro esqueleto
para que un día
sea el instrumento
que produzca sonidos –perfectos–.
Agudobeat
de maquina moribunda
que guarda los secretos de la
medianoche y su fascinación.
Afuera,
la Gran Manzana se pudre,
personas la atraviesan
como gusanos
y dejan agujeros
por donde las palabras son nidos de nuevos Golems.
Babel electrónica,
con su geometría fractal
y oraciones de cuerpos –desolados–,
es la Manzana de los idólatras.
Idólatras
dispuestos como siempre
al sacrificio.
Y todo
en esta ciudad,
en este jardín,
esta mente,
es posible de ser leído
como carta astral
o mapas estelares.
(…)
V
¿El amor es logos?
No,
solo desaparece las cosas
y no habrá lenguaje
ni átomo
para dar con –toda– esa destrucción.
Y
con amor
regresamos
a ser polvo cretácico,
una huella de la raíz primordial.
Verbos
antes de la explosión
y acústica en el vacío.
Definitivamente,
las pequeñas culpas
se heredan por amor.
VII
La vida es el cuerpo.
En la piel
ya no hay misterios:
se es lo que se es.
La cicatriz
tampoco miente
es lo más enigmático del cuerpo.
Jardín Botánico – IV
El aliento
no puede liberar el fruto del cerezo,
ni el sabor sellado
en un alambique de viento.
Trascendental fue ese instante
en el que la noche del jardín fue una palabra
para nombrar al cerezo
y liberar su olor.
El aliento,
un fenómeno limpio
que ahora es el cubo donde cabe toda la realidad.
Una realidad es necesaria
para atrapar el logos.
¿Es mi época, el tiempo de la salvación?,
¿o es el reino de la duda?
Y la respuesta son estos 64 ideogramas
para plegar la realidad a total Voluntad.
El choque de los opuestos
es un lamento.
Dos momentos
que se juntan
en la Tragedia.
Camino feliz de los opuestos.
Me hundo
en la parte más hermética del laberinto.
Mientras deliro,
se crea un universo
grande y perfecto,
pero la ansiedad no me permite contemplarlo.
“Así es la fantasía solitaria”, pensé,
“tan grande e inabarcable”
o más aún,
una rosa negra
flotando en el hedor de las alcantarillas.
El mundo despierta
y nuestros cuerpos se disuelven
en el dulce licor del verano.
El sol remata nuestras dudas
y seca lo que queda del delirio.
Nos volvemos hogares extraños
donde lo raro encuentra refugio,
mientras la radio esparce jazz
en un mundo líquido.
El día se acaba
en sesenta pasos sincronizados
y me espera
la madre sueño
con su cuerpo tibio.
*(Lima-Perú, 1981). Poeta. Ingeniero industrial por la Universidad de Lima (Perú) y doctor en Educación por la UNINI (México). Ha participado en eventos como el Festival de Poesía de Bogotá (2016 y 2020), I Jauría de Palabras (Santa Cruz, 2019), entre otros. Ha publicado en poesía Tetrameron (2003), Lumen (2007), Radio Futura (2008), Osario de criaturas perplejas (2014), La música del hielo (2015), Hombre fractal (2018) y Jardín mecánico (2020). Ha publicado relatos en revistas digitales y en las muestras Fu-turos Inciertos (2019) y Constelación. Muestra de cuentos peruanos de ciencia ficción” (2021). Parte de su poesía ha sido traducida al inglés, italiano, bengalí y uzbeko. Administra el blog cultural Fundador de Supernovas (www.luiscruzalvarez.blogspot.pe).