5 poemas de «Geografía de la intemperie» (2024), de Alba Seoane Cegarra

 

Por Alba Seoane Cegarra*

Crédito de la foto (izq.) archivo de la autora /

(der.) Loto Azul Ed.

 

 

5 poemas de Geografía de la intemperie (2024),

de Alba Seoane Cegarra

 

 

Memoria

 

Qué será de nosotros

si un día

sujetas mi rostro con tus manos

y solo atrapas mariposas blancas.

De qué índole será nuestro amor

si yo disminuyo

y me ahueco

hasta convertirme en un ovillo

de rastrojos y cernícalos ciegos.

Cómo podré besarte

si en mis labios dormitan las palabras

y un miedo antiguo

ha construido allí su casa.

Dónde bailarán nuestros recuerdos

en qué salón

brotará la hierba sobre mi memoria.

Cómo extirparás

tu imagen del ruido blanco

en mi cabeza.

 

La poeta Alba Seoane

 

Hálito

 

Su cuerpo aún caliente temblaba entre mis manos

un mecanismo submarino

me extraía del plumaje

me insuflaba aguas luminosas.

Desde mi pecera alcanzaba a verlo

girando en dirección al mar.

No tocaban mis pies el hielo

conseguía mantenerme sumergida.

La parte austral de mi pecho

había amanecido

sobre su cuerpo

aún caliente

cercano al sol.

 

 

 

Arraigo

 

Vengo de un país en guerra

de una infancia en llamas

de una casa con olor a puchero

y colonia de padre muerto.

 

Vengo de un dique sobrexpuesto

de una columna sobrexcitada.

 

Soy hija de un jardinero

que disecciona los pistilos

y despierta a las nomeolvides.

 

Mi cuarto reposa en alta mar

allí donde los seres ciegos navegan sin causa.

 

No me falta el alimento

una jauría de lobas

anida en mi cama.

 

 

Una misma especie

 

El yodo se infiltró en mis huesos, calcificó mi espalda lamida por el beso contenido del mar.

“Somos de la misma especie” contestó el artrópodo. Un vidrio estrellado se reflejó en el lomo de la ensenada. Mientras brillábamos, el sol discurría lábil por mi útero, me atravesaba como un río.

“Somos de la misma especie”.

Un gemido del fondo me resultó conocido, hundí mi cuerpo hasta el lugar donde duermen los peces, el sol abría allí su boca para insuflarme el oxígeno.

No podía asfixiarme.

Somos de la misma especie, un reverso del mar, eco del espacio.

 

La poeta Alba Seoane

 

Àlef

 

Cronos bulle bajo tus faldas

tiende una mano amiga

carcomida entre dos razones.

Ojos de muñecas incendian el campo y las ciudades

cabezas sin culpa

que ruedan por los ministerios.

Caen dioses como estrellas

y las mujeres entierran sus huesos

donde nadie las recuerde.

Tiende Cronos una mano amiga

en el cielo escupen bocas

yermas como un credo.

Una red intestinal

comunica a los poetas muertos

a los ingenuos

sostiene el llanto oscuro

de una voz

que todas las lenguas reconocen.

 

 

 

 

 

*(Murcia-España, 1981). Poeta y narradora. Licenciada en Traducción e interpretación y estudiante de psicología. Se desempeña como traductora/escritora en Barcelona (España). Participó en el evento poético Agosto clandestino en Logroño (La Rioja, 2023). Ha publicado los poemarios De tu boca, el despertar (2013), Todas las primaveras son pecado (2016), Homogénesis (2023) y Geografía de la intemperie (2024); también ha publicado relatos cortos dentro de antologías: El mar de Venus (2010). La Habitación de los Pájaros (2012), Epidermis (2012) y cuentos infantiles: Ferro, el muñeco de hojalata que quería ser un niño (2011) y Abel y el reino de cristal (2023).