5 poemas de «Arritmia» (2023), de Hernán Contreras R.

 

Por Hernán Contreras R.*

Crédito de la foto (izq.) www.edicionesfilacteria.cl /

(der.) Signo Ed.

 

 

5 poemas de Arritmia (2023),

de Hernán Contreras R.

 

 

Extremos

 

La mariposa no puede recordar que ha sido oruga

así como la oruga no puede adivinar que será mariposa

porque los extremos del mismo ser no se tocan.

Enrique Lihn

 

Ver el sol en un vidrio botado

a las dos de la tarde    un día de invierno

 

el calor se nos perdió hace meses

en lo que podría ser    una botella rota

se encuentran las tardes de verano

el ruido de los álamos y un niño corriendo

 

es solo un vidrio

encandila durante unos segundos y aparecen

las imágenes de una estación contraria

 

queremos frío en el calor y calor en el frío

tomamos cerveza o vino

para sentir el otro extremo

 

el niño alcanza su objetivo

y una hoja

suena bajo los zapatos

 

el vidrio ya no te encandila

 

ahora ves el sol

en una poza que aún no se seca

y todo parece indicar lo siguiente:

 

el suelo contiene al cielo

en el agua de la lluvia de ayer.

 

 

 

Riesgos

 

la inmundicia dices, la inmundicia

y un mundo a contraritmo: ¿qué esperas para dar el salto?

Tania Favela

 

Se secaron los ojos apenas abiertos

las pestañas volaron y se mezclaron

con las primeras sombras del día      

 

frenar

era romperse

 

un cuerpo intenta despegar

la calle que vibra por el calor

deja zapatos abandonados

 

a nuestras espaldas

todo lo imaginable

fue en otros años

que el color de los cerros

cambiaba con las horas.

 

 

Distracciones

 

Y fuimos descendientes de las aves

semejantes al caer en picada

Marcela Parra

 

Abrí las ventanas para buscar

silencio

en los ruidos

 

como en una caída

mis párpados se arrugaron

buscaba mirar

la quietud del vuelo de un cóndor

luciérnagas invertidas

que trajeran la noche a pedazos

 

me había llevado a la casa

todas las suelas que ese día

intentaron emparejar                         el pavimento

 

hoy también vi un listado de nombres que solo crecía

 

de nuevo        

palabras intermitentes

otra vez

por todo lo que es                             una jornada

 

 

 

Paseo

 

caída de paños

sobre veredas aún frías

retazos

de tela comprados

en cámara lenta

Vicente Oyarzún Cartagena

 

Ver siluetas alargadas

multiplicadas como mano que se agita

y adivinar qué banca se mantendrá vacía

 

las vitrinas nos vuelven a recordar el paisaje

 

soledad encandilada al estar rodeada de gente

 

la imagen de quien se va sin despedirse

se borra un domingo

      en silencio

los ojos buscan el sol en las veredas

los pasos propios en los oídos

cuando todos los colores están                  en donde pertenecen

 

se escucha un pétalo

al caer

aun así

alguien podría extrañar los paños en el piso

las palomas entre las migas

carros de comida      cada vez más ofertas       más distracciones

pero sólo se confunden entre sí                   papeles y hojas secas

que amagan con quedarse fijas en el suelo

donde algunos duermen y soportan el silencio hasta la hora

en que abren las oficinas

 

nos dicen

que un lugar se vacía con su propia multitud

 

el ruido de un río

que anuncia un escape entre tanta piedra.

 

El poeta Hernán Contreras

 

Interpretaciones

 

el viento que entra por las ventanas

lo convierte todo en bandera

Andrea Alzati

 

Toda noción de lo que vemos

es el intento de hallarnos aquí

la lluvia el agua de los aires acondicionados

el viento la velocidad de las micros en carrera la brisa

las piletas de las plazas

 

sólo la nieve    los pétalos del almendro

me han hecho sonreír.

 

 

 

 

 

*(Santiago de Chile-Chile, 1990). Poeta. En la actualidad, reside en Puerto Montt (Chile). Ha publicado las plaquettes Proyecciones (2018) y El agua que baja (2022), y los poemarios Trayecto hacia algunos días (2018), Voces a la barricada (2021) y Arritmia (2023).