Por Paúl Puma*
Crédito de la foto (izq.) Ianua Ed. & PUMAEDITORES /
(der.) archivo del autor
3 poemas de Cerati (2023),
de Paúl Puma
Cada episodio tiene un tono
diferente, un entorno diferente, incluso una
realidad diferente, pero todos son acerca de la
forma en que vivimos ahora y la forma en que
podríamos estar viviendo en 10 minutos si
somos torpes.
Charlie Brooker
El 15 de mayo de 2010, Gustavo Cerati, el exvocalista argentino de la Banda de Rock Soda Stereo padeció un accidente cerebrovascular isquémico en el Club Moulin Rouge de Caracas, luego de un concierto. El cantante se mantuvo en coma por cuatro años, siete días, nueve horas, 31 minutos y 20 segundos [luchó en ese limbo desconocido de la memoria y la imaginación] para entregarse finalmente a la muerte el 4 de septiembre de 2014 en una clínica de Buenos Aires a causa de un paro respiratorio.
EPISODIO 1
XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXHAY UN DESGARRADO TRACKING EN LA PANTALLA SATELITAL QUE ME ENVÍA BELLADONA LICUADA Y RESPLANDECIENTE A LAS VENAS. ES UN CORAZÓN OBNUBILADO DE ESTRELLAS REPLETAS DE PASADO – PRESENTE – FUTURO ARRIMADAS A LAS LÁGRIMAS DE NEÓN DE UN DIOS BRUTAL E INCANDESCENTE. NO PUEDO DESCRIBIRLO. ES ANDRÓGINO Y /Ɵ/ U HERMAFRODITA, COMO UN SOFISTICADO DISPOSITIVO VERDE OLIVA DE 5 CENTÍMETROS Y POCAS MILÉSIMAS QUE ENGENDRA UN DIOS SATÁNICO Y DEMENCIAL HACIÉNDOLE EL FELATTIO A LA MODERNIDAD, MIENTRAS LOS OTROS GOZAN EN SUS LÍQUIDAS PANTALLAS DE MARSUPIAL ESPUMA NEGRA.
VEO UN URINARIO COLGADO DE LA PARED QUE DESTILA MIERDA OXIDADA EN UNA GALERÍA DE NUEVA YORK. VEO A UNA PRINCESA SECUESTRADA POR UN ASESINO. VEO AL PRIMER MINISTRO DEL PRIMERÍSIMO PRIMER MUNDO FOLLÁNDOSE A UN CERDO, AUNQUE NO LO QUIERA, EN UN SET DE TELEVISIÓN Y A SEÑAL ABIERTA. VEO A MILLONES DE TELEVIDENTES GRITAR: “¡HAZLO! ¡PODEMOS HACERLO!: JUST DO IT! WE CAN DO IT!”. VEO AL ASESINO ABANDONAR A LA PRINCESA EN EL PUENTE MÁS EMBLEMÁTICO DE LONDRES. VEO AL CRIMINAL EN LA CONSUMACIÓN DE SU GRITO, AHORCÁNDOSE CON EL ALAMBRE DE SU PLANCHA PARA CERRAR SU OBRA MAESTRA DEL SIGLO XXI Y DEL NUEVO ESQUIZOFRÉNICO MILENIO.
Este es el demencial absurdo del videojuego de una/esa/esta/otra Era terriblemente inadmisible y mórbida. Es el asco inquebrantable del deseo, empalagado de cáusticos recuerdos peri-patéticos de lo que vi. Silencio multiplicado por una caminata desoladora. Astillas en el horizonte de una tragicómica estulticia humana QUE SE INCENDIXXXXXX XXXXXXXXX
XXXXXXXXXXXXXX
XXXXX
NEXT LEVEL
Si la tecnología es una droga —y se siente como tal— entonces ¿cuáles son los efectos secundarios? Esta área —entre el placer y el malestar— es donde MI ESPUMA OSCURA se establece. El ESPEJO NEGRO es lo que usted encontrará en cada pared, en cada escritorio, en la palma de cada mano: la pantalla fría y brillante de un televisor, un monitor, un teléfono inteligente, una imagen holográfica, tridimensional, una proyección plañidera del ser: jet lag.
ESTA ES LA TECNOLOGÍA DE LA INFAMIA, I A-A I, LA QUE DESHAGO ENTRE LA PUNTA DE LOS DEDOS LUEGO DE RASCARME EL ANO. ESTA ES LA MALLA CORROMPIDA POR EL SER HUMANO ANO ANO, EL NEANDERTAL QUE SE REGODEA EN SU CORAZÓN DE AJONJOLÍ PODRIDO Y SU AUSENCIA DE HERRAMIENTAS PARA CONTROLAR SU IRA, SU EMOCIÓN. AQUÍ RADICA LA BELLEZA DEL ESCARNIO. OLFATEO. HUELO DESPACIO. INHALO LA MIERDA DE ESTA EDAD. LENTAMENTE.
Netflix
Hay algo raro en el escote de esa chica. Hay algo raro en el ojo de es● adolescent●. Sus ojos no son los mismos. L●s de ell●s. Ese mecanismo tubular ha hecho de sus cuerpos animales que recuerdan su futuro – pasado en la baba de los colmillos de un lobo rabioso que se encarna en el hocico de un presente en ciernes.
Recuérdalo todo. Me verás volar como una pelusa paraedólica captada por un fotón. Recuérdalo todo. Recuerda a Funes el híper nano memorioso recordándote mientras agonizan sus pulmones llenos de pus plagada de millones de constelaciones de datos a raíz de la ventana a otra dimensión que se abrió cuando se cayó de un caballo. La memoria es una lánguida piltrafa que se deshace en las palabras. La memoria es un anzuelo sumergido en una escafandra. La memoria es el ácido que quema el rostro de la página y la reproduce sin cesar. La memoria es el resplandor de la Tara. La memoria es el holocausto nazi en la pupila de una hiena. La memoria es una bomba atómica que desintegra la piel de una niña oriental mientras corre y llora y grita en la calle. La memoria es un conjunto de archivos bien retocados, hasta el puntillismo caligráfico, historiográfico, gráfico, del último detalle en la dictadura de Videla. La memoria es un Boing 747 cargado hasta más no poder de padres y madres y ancianos y jóvenes y niños lanzados al océano Pacífico. La memoria es la matanza indígena apelada por un clérigo del futuro de apellido De las Casas que le dijo a un Rey: “pare la masacre, nos vamos a quedar sin mano de obra”. La memoria es el impulso de un indiano que logró denominarse ALGO y que se estremeció por la situación de sus hermanos, para escribirle una carta al rey de España (que fue hallada en Copenhague siglos después), poco antes de ser enviado a las mitas o cavernas donde sus parientes aborígenes nacían y morían sin ver la luz del día o de la noche o las estrellas. La memoria es el conjunto de castigos que se inventó la Gran Putísima y Sangrante Inquisición para traer negros de Europa a América para Castigar Down y vigilar Up, para tapiar, cremar, desollar o enterrar en vida a sus juguetes humanos, casi como en Auschwitz ARBEIT MACHT FREI, como en esos baños públicos en los que se exterminaba con dedicación y burocracia, como en esa industria inmemorial que institucionalizó las empresas de jabón con la grasa de seres humanos o las peinetas realizadas con huesos de seres humanos o las lámparas con piel de seres humanos, de niños, por ejemplo. Porque De las Casas citó en su crónica 565 veces a los perros traídos de la vieja Europa. Porque De las Casas contó con lujo de detalle a la Corona cómo se desmembraba a los bebés de los aborígenes americanos frente a sus padres y luego se lanzaban los pedazos de seres a los perros. La memoria es un atril gigante con fisuras abismales. La memoria es el crío sordo-ciego y mudo que descansa en los testículos y en los ovarios del establoshmet y de la episteme vertical, verticalísima. La memoria es el puñal ciego del engendro de un aborto vivo que se cree gobernante y se pone peluquín rubio y soslaya a su propio país separando a los hijos de sus padres para forjar nuevos campos de concentración o campos de la tristeza verdadera y la melancolía y la maldad más pútrida de este infra mundo. La memoria es un feto ambulante que se cree mandatario, pero que es un dictador (diestro en corromper a su parcela de militares-amigos en un círculo imposible de romper) jugando al paroxismo de la estulticia y el latrocinio epifánico financiado por la oligarquía y la D E A y el dinero sucio para lavar y lavar. La memoria es el Archivo de Indias que aún no ha sido levantado en su maléfica cartografía pormenorizada de la conquista, de la neo-colonización y la rapiña atroz. La memoria es el grito callado que debe liberarse. La memoria es el silencio que se pudre en las palabras ensangrentadas. La memoria es el corazón de nuestro tiempo bárbaro. La memoria es el cáncer que se desatará en el grito indecible y libérrimo. Tan insignificante y tan crucial como la pelusa que no logras distinguir, menospreciado lector, en el universo ficticio del papel virtual de esta página, ¿verdad?
*(Quito-Ecuador, 1972). Escritor y crítico literario. Dr. PhD. en Filosofía y Letras: Literatura Hispanoamericana por la Universidad de Alicante (España). Obtuvo el Premio Nacional Aurelio Espinosa Pólit (2002), Premio Nacional Joaquín Gallegos Lara (2017). Premio Nacional Gobierno de la Provincia de Pichincha (2017). Se desempeña como catedrático de la Universidad Central del Ecuador. Ha publicado 22 libros publicados en todos los géneros literarios incluso pedagogía y filosofía. Ha publicado en cuento La mancha mongólica (2019); así como 30 libros académicos en coautoría (https://scholar.google.es/citations?hl=es&user=Ch2q4ckAAAAJ); en crítica literaria Breve acercamiento a la ensayística de Miguel Donoso Pareja (2013), Notas Breves a la Poesía Reunida de Pedro Gil (2019), entre otros.